¿Quieres ahorrar agua? Píllate un pedal…

Los grifos accionados mediante pedales te permiten enjabonarte las manos sin necesidad de abrir el grifo antes. Estos dispositivos son eficientes e higiénicos, por lo cual se han ganado un puesto en las cocinas de los restaurantes y en los quirófanos de los hospitales. Así que ¿por qué no instalarlos en los hogares? Con ellos se podría reducir el consumo de agua en un 50%, y si además se trata de agua caliente, también se ahorra energía.En un fregadero, se puede controlar el flujo del grifo con un pedal como si se tratase del acelerador de un coche. Es más fácil pisar el pedal cuando te lavas los dientes, te afeitas o lavas los platos. En un hogar donde vivan cuatro personas, el uso de estos controladores a pedal podría ahorrar - solo en la cocina - 28.400 litros de agua cada año. Y por supuesto, a ese ahorro habría que sumar el ahorro energético proporcional para calentar el agua.Los grifos a pedal protegen también contra la transferencia de bacterias de grifos a manos. Son particularmente útiles cuando tienes las manos manchadas de pintura o tierra.Son relativamente fáciles de instalar bajo el fregadero, aunque la mayoría necesitan tener cerca una conexión eléctrica.En España también están en el mercado, y algunas casas incluso ofrecen su catálogo por internet. ¿Te animas?
Traducido de Efficient: Foot Pedal Faucet Controllers

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